miércoles, 11 de febrero de 2015



MARIA MONTESSORI Y LA PEDAGOGÍA CIENTÍFICA

ARTÍCULO DE OPINIÓN_  MARIAGANDIA


Educadora, pedagoga, científica, psiquiatra, filósofa, antropóloga, bióloga, psicóloga y primera mujer medico en Italia. María Montessori fue una mujer controvertida,  independiente y rompedora, que generó un impacto en la renovación de los métodos pedagógicos de principios del siglo XX.
Trabajó para mejorar las condiciones de vida, sobre todo en movimientos para la emancipación de la mujer (representante de Italia en el congreso de Berlín de 1896, de ahí su famoso discurso sobre educación y libertad). Fue una mujer muy visionaria para su época, propuso ideas que hoy en día encontramos evidentes pero que antes constituían innovaciones radicales. Y con ellas puso en práctica su método, “el método Montessori”, basado en un triángulo entre ambiente-niño-amor.
Muchos han sido los que han pasado por centros con el método Montessori, desde George Clooney hasta los fundadores de Google, Amazon y Wikipedia. También se realizó un estudio1 entre 3.000 ejecutivos innovadores, en un periodo de seis años obteniendo que, un número significativo de ellos,  habían cursado sus estudios en escuelas Montessori.
Maria Montessori comenzó a trabajar con niños perturbados mentalmente e intentando hacer llegar a la sociedad que sí tenían posibilidades de desarrollo de potenciales y que no suponían una carga a la sociedad.
Su método partió de la observación de los niños, la mente absorbente éstos, los periodos sensibles que facilitaban la adquisición de una habilidad, la importancia del ambiente preparado y el papel clave que debía adoptar el maestro. Éste papel consistía simplemente en guiar al niño, no debía de dar órdenes, debía de tener fe en él, valorarlo y tener confianza. No castigaba, incitaba a que hiciera su propia autoevaluación. Se basaba en el respeto a los niños y su capacidad de aprender, ya que les consideraba como la esperanza de la humanidad. Montessori observó la relación que existía entre el mundo sensorial, el táctil y el mental en todas las fases de su aprendizaje, por ello necesitaban unos materiales sencillos, manejables, atractivos y hechos a medida de quienes lo iban a usar así como un entorno amigable y seguro.



El niño, mediante el tacto y la vista, iba descubriendo el uso y todas las posibilidades de estos materiales, iba innovando y redefiniendo sus límites y funciones a razón de su capacidad individual.
Gracias a éste método trasmites una libertad al niño no contraria a la disciplina sino aliada de esta, contribuyes a su autodisciplina.
“El niño que ha aumentado su propia independencia con la adquisición de nuevas capacidades, solo puede desarrollarse normalmente si tiene libertad de acción” 2
Hoy en día no usamos esas bases para enseñar a los niños, muchas veces les cortamos las alas, no les alentamos a pensar por ellos mismos, a que cuestionen informaciones, a innovar ni a ir a su propio ritmo.
En una revista3  se manifestaba que “si observamos a los niños de cuatro años, ellos están haciendo preguntas constantemente y maravillándose por la manera cómo funcionan las cosas. Al cumplir los seis años, dejan de hacer preguntas porque aprenden que sus profesores valoran más las respuestas correctas que las preguntas curiosas y provocativas. Rara vez vemos en los adolescentes la capacidad de hacer estas preguntas. Para el momento en el que forman parte del mundo corporativo, la curiosidad les ha sido extirpada casi del todo”.
La inocencia que tiene un niño a cortas edades la va perdiendo por el simple hecho de la ignorancia de la gente que le rodea, cortamos la imaginación y la confianza en sus sueños.

Por otro lado también es cierto que el hecho de cuestionarse las cosas que no consideramos que vayan de acuerdo a nuestros valores hace que en un futuro sea muy difícil aceptar la realidad tal y como es. El método Montessori te ayuda a cuestionar la información que te ha sido dada antes de considerarla cierta, decidir por nosotros mismos, fomenta la innovación, la libertad, el avance de cada niño a su ritmo… Todo ello es muy productivo de cara al aprendizaje de los niños, pero el mundo de hoy en día es muy distinto a ese ideal de compañerismo, de ausencia de competitividad. ¿Qué le pasaría a esos niños una vez salgan de esa enseñanza y se topen con el mundo real?
Ahí es donde me pregunto si el método Montessori podría suponer una ayuda o no de cara al futuro del niño, sería muy bonito que todo el mundo estuviera inculcado en las ideas Montessori en unos valores de solidaridad y capacidad cooperativa pero desgraciadamente no es así, por lo que el niño podría tener problemas para adaptarse a una nueva forma de disciplina y a poder a seguir unas reglas o instrucciones con las que no está de acuerdo.

Fueron muchos también los que se sintieron reacios con el método Montessori, incluso llegó a enfrentarse al Ministerio de Educación de Italia antes de la fundación de la Casa Dei Bambini4, fue criticada e incluso tachada de excéntrica y elitista, a lo que Montessori murmuraba “no han entendido nada”.

 Aún hoy en día existen muchos detractores, mayoritariamente por, como hemos dicho antes, la innovación y los métodos no convencionales como la ausencia de exámenes, calificaciones o tareas y la forma de evaluar, ya que se trabaja con modelos completamente distintos a las escuelas de antiguamente y de hoy en día.
De ahí a que los profesores que imparten clases en centros con este método tienen que estar acreditados por el certificado Montessori.
Otro elemento a tener en cuenta seguido a eso, es la formación que exige también a los padres y los posibles problemas de adaptación que estos generarían en casa, necesitan continuar con la misma formación también en su entorno más cercano.

 Éste método, con ideas tan evidentes y sencillas resulta muy interesante. Realmente el niño cuando está creciendo tiene la necesidad de tocar, de realizar actividades, aprender con ejemplos de la realidad trabajando la vida práctica, aprender con unos materiales acordes a su tamaño y trabajar, en general, la educación sensorial. Hoy en día existen muchos centros Montessori donde aparte de enseñar asignaturas, aplicando este método, generas el aprendizaje de valores como el respeto, el significado del compromiso, la importancia del perdón, valorar lo que se tiene, etc.
Yo optaría claramente por ese tipo de enseñanza si existiera la posibilidad de que toda la sociedad siguiera este aprendizaje o intentaría que fuera gradualmente inculcándose.
Hoy en día, siendo realista, no existe esa posibilidad en la educación, aunque seguiría esa enseñanza en la educación primaria del niño y cuando llegara a la secundaria seguiría con el modelo de Montessori aunque modificando ciertos aspectos para que el día de mañana el niño no notara ese cambio tan brusco con la realidad en la que nos encontramos, un mundo lleno de reglas y poca libertad, y así supiera desenvolverse en la vida con los valores inculcados por este método y compaginar la tolerancia y la aceptación a las personas que tienen distintos valores sabiendo que son los “otros” los que están equivocados.




MAPA CONCEPTUAL_METODO MONTESSORI




1. Estudio realizado por los profesores Jeff Dyer de Bringham Ypung University y Hal Gregensen de INSEAD.
2. Frase de María Montessori.
3. Entrevista realizada por la revista Fortune.
4. Primera “casa de los niños” que inauguró con el modelo Montessori, situada en el barrio de San Lorenzo de Roma, en 1907.









                       "El secreto de salir adelante está en empezar."